domingo, 19 de abril de 2020

Socioterapia y Pertenencia


La fuerza de la pertenencia en la pandemia covid 19



Nos dice Octavio Paz, en un maravilloso poema. “Para llegar a ser he de ser otro, salir de mi, buscarme entre los otros, los otros que no son, si yo no existo, los otros que me dan, plena existencia”.


Una de las necesidades relacionales básicas, de todo ser humano, es la necesidad de pertenecer, de ser aceptado, por otros. Es que todos los seres humanos tenemos el deseo de ser parte de algo mayor, màs allá de nosotros mismos. Desde que nacemos, nos vamos relacionando en nuestro grupo familiar, es la red familiar primaria, padre, madre, hermanos, luego esa trama relacional se va extendiendo, con la familia ampliada, abuelos, tìos, primos, con compañeros de estudio, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, de los clubs, de espacios religiosos.
"Junto con nuestros padre y hermanos formamos una comunidad, con un destino comùn, una familia, como familia sin embargo pertenecemos tambièn a una red familiar  en la que se unen los dos grupos de origen de los padres, para formar un mayor sistema de personas, a las que quizas ,no conozcamos en su totalidad, pero que a pesar de todo, son significativas para nosotros.(1)

¿Què es una necesidad?: es la situación de privación en que se encuentra una persona relacionada con los aspectos que le son indispensables para llevar adelante su desarrollo saludable. Partiendo de las necesidades de básicas de supervivencia,un trabajo digno, alimentación adecuada, cobertura de salud, vivienda. Necesidad de seguridad, asì vamos ascendiendo en la pirámide sobre la jerarquía de las necesidades, creada por Maslow, hasta llegar a las necesidades sociales (de amor y pertenencia), necesidades de autoestima, necesidad de trascendencia. (2)

Hoy frente a la situación que estamos viviendo, tan única e impensada para muchos, hace figura con mayor amplitud, la necesidad de estar relacionado.

Es que debido al confinamiento, con el distanciamiento físico,

que conlleva, observamos en parte de la población que puede llevarlo a cabo.


Hago paréntesis, dado que en ciertas poblaciones es casi imposible realizarlo. A su vez hay servicios esenciales, que requieren de la presencia, de médicos, enfermeras, trabajadoras sociales, empleados de sitios de venta de alimentos, transportistas, recolectores, gastronómicos, periodistas,  que siguen asistiendo a sus empleos. Cierro paréntesis.


Prosigo, las personas que se pueden quedar en sus casas, están expresando, en gran amplitud, un mayor deseo, de encontrarse, con los otros, con sus familiares, amigos, compañeros de trabajo,  a través de los recursos virtuales disponibles, whatsapp, skipe, zoom, llamadas telefónicas, Facebook.

Eso nos muestra como el pertenecer, el sentirse parte de, es tan vital para el ser humano. Desde una mirada sistémica, nos dice Hellinger: En las familias, “Todos tiene el mismo derecho a pertenecer“ (3)


Por otra parte, vemos como la ausencia de la pertenencia, de esa posibilidad, de ser con un otro, lo hace sentir muchas veces, al ser humano, desolado, triste, angustiado. Nos dice Lersch: "la consideraciòn del hombre como ser social ha mostrado en que medida la vivencia y la conducta del individuo se hallan determinadas por un ambiente social. a esta dependencia nos referimos cuando hablamos de socialidad como rasgo esencial de la existencia humana."(4)

En èste nuevo mundo que ya estamos transitando, cada vez se nos muestra màs la necesidad de salir del “mìo e ir hacia el nosotros”. Es decir, salir del  del ego, e ir  hacia la conciencia del eco sistema, como dice Scharmer.(5)


Una manifestaciòn de ello se muestra, cuando nos solicitan que nos quedemos en casa, los especialistas sanitarios, y ya no sólo lo hacemos para cuidarnos nosotros, también lo hacemos por los otros. Es decir por ese semejante, al que tal vez no conozcamos, y que al cuidarnos nosotros, también lo estamos cuidando. Podemos aplanar la curva  de la enfermedad, cuando todos tenemos esa misma meta, priorizar la salud, nuestra y de los otros.

Considero que èsta crisis profunda que estamos atravesando, dentro de la cual, todos estamos inmersos, donde ya no hay fronteras, ni condición social, todos la padecemos de igual modo. En la cual muchas personas, están debatiéndose entre la vida y la muerte, la salud o la enfermedad, la real subsistencia o la desolaciòn absoluta.

Se nos presenta una oportunidad viable, que pueda conducirnos a la expresión de una mayor conciencia social, con un espíritu màs altruista.  Y sea la posibilidad de proyectarnos, hacia la renovación de valores, desde una concepción màs sistèmica e integradora de la humanidad, en post del bien común.  


Lic. Liliana Calvo
Socioterapeuta gestalt
Directora del Centro Grupo ConVivir y de la Revista ConViviendo

(1)     Weber Gunthard , Felicidad Dual, Editorial Herder, 2004
(2)     Turienzo Rubèn,  El pequeño libro de la motivación, Alienta editorial, disponible en https://www.planetadelibros.com/libros_contenido_extra/34/33578_EL_PEQUENO_LIBRO_DE_LA_MOTIVACION.pdf
(3) Hellinger, Bert, autor del libro La punta del ovillo de editorial Alma lepik.
(4) Lersch Philipp, Psicologìa Social Editorial Sciencia,1967
(5) Scharmer Otto, autor del libro “ Los fundamentos de la teoría U, principios bàsicos y aplicaciones.